
Los territorios no deberían ser causa y escenario de conflictos. La tierra y el agua que los conforman son generadores de vida, nadie tendría que morir por la vida, es una paradoja absurda. El cuerpo, la carne, la carcasa que nos sostiene debe ser respetada para que en ella pueda ejercer su autonomía el pensamiento y el alma. Defender a las personas y sus derechos lleva implícito cuidar de su entorno, el espacio que da sustento a la materia y permite el desarrollo del individuo; con él se generan las áreas de confluencia donde el intercambio cultural es una consecuencia inevitable.
La propuesta es un mapa mundi político, pintado por el color señero de la carne, idéntica en todos los seres humanos.
Un comentario en “Texto + Producción__ PANGEA. Manuel Granados”